En nuestro castellano rioplatense hay una expresión que a mí me hace mucha gracia y que se aplica a personajes públicos. Es esa expresión que dice: "Fulanito salió a desmentir / a declarar / a aclarar que...".
La imagen que invariablemente surge en mi cabeza es la de abrir la puerta de la casa, no moverse del umbral y declarar o desmentir lo que sea de que se trate esa declaración o esa desmentida o esa aclaración. La mezcla entre el umbral de una casa de barrio con la imagen de un político, o un personaje del fútbol, o en general un personaje público me parece ilógica y hasta surrealista.
Me hace acordar, además, a una vecina que tuve durante diez años, en un departamento donde yo vivía. Trabajaba, llegaba al edificio a las cinco de la tarde, y de allí hasta las ocho o nueve de la noche se las ingeniaba para estar en la puerta del edificio, bien en el umbral y observaba todo, absolutamente todo. Y por supuesto, sacarnos el cuero a todos los vecinos. Hablaba con A, y le sacaba el cuero a B. Hablaba con B y, sí, le sacaba el cuero a A.
Yo creo que los vecinos le tenían un poco de lástima. Pero para no irme del tema: en ese mismo umbral me imagino a un ministro, vestido de traje azul, con corbata al tono, bien peinado, y la imagen es por lo menos curiosa.